domingo, 7 de septiembre de 2014

RECUERDOS DE MÉXICO A LA DISTANCIA.

  Iré a México Dios mediante, el próximo mes, gracias a
una invitación.  Por fin conoceré el país de los charros y
mariachis, aquellos que me deleitaban cuando era un niño
e iba al Cine a ver las películas más populares del país
en aquella época.

  "Cantinflas", "Tin Tán", Pedro Infante, Elsa Aguirre,
María Félix, etc. Todos los grandes artistas mexicanos
los veía en los cines de mi querido Trujillo, al norte del
país.
  Cuando vine a Lima, perdí un poco la afición por el
cine mexicano; sin embargo, me di el gusto de conocer
personalmente a las estrellas de ese cine que pasaron por
Lima.  Era un adolescente de doce o trece años cuando
llegaron a Lima, primero: Elsa Aguirre y fui a esperarla
por la puerta de salida del Cine Monumental en Breña.

  Sabía que por más estrellas de Cine que fueran, tendrían
que entrar y salir del Cine-Teatro por alguna puerta. Me
averigüé por donde era la salida y la esperé.  Primero
salió una joven delgada, parecida a ella. Yo creí que era
Elsa, pero me dijo: No, yo soy Hilda.  Elsa viene después.

  No sabía que había venido con su hermana, quien fue
también actriz de cine.  Luego salió doña Elsa y la gente
se le abalanzó.  Ella alcanzó a obsequiarme una fotografía
suya, que lamentablemente no conservo.

   Posteriormente vino Fernando Soto "Mantequilla", era
un tanto bajito, pero como en ese tiempo yo todavía no
había crecido lo suficiente, alcancé a cogerlo por el hombro,
sentí el panqueque de su terno. Era afable y sencillo.

  No parecía una persona tan famosa que hubiese filmado
tantas películas.

   A los demás los vi por la televisión, sobre todo a "Cantinflas"
quien hizo una corrida de toros bufa que transmitió en vivo
y en directo la televisión, la cual hizo desternillarse de la risa a
los televidentes. "Cantinflas", ya lo dijo "Chaplin" era el mejor
cómico del mundo.

  También llegué a ver a "Tin Tán" primero vino con su carnal
"Marcelo" y tuvo una temporada en la televisión muy exitosa,
que repitió luego de unos años, ya sin su carnal.

  Todavía recuerdo la cancioncita o jingle con la que presentaba
su programa: "Alerulá, tun dá, tun dá, Alerulá, tun dá tun dá
cortesía de Ña Panchapiquipiquichá".

   "Ña Pancha" era un detergente popular al cual yo también
le haría posteriormente una propaganda para el canje de sus
"Ña Bateas", comercial que pueden ver en
youtube, poniendo: emrobh77.

   A Pedro Infante no lo pude ver. Se presentaba en un Cine-Teatro
más alejado de mi casa: el "City Hall" (ver fotos de los cines que he
publicado en este mismo blog, bajo el título:
   Cines limeños cerrados y/o reciclados); aunque pude escucharlo
por la radio.

   Radio "Victoria" también transmitió en directo la transmisión
de su espectáculo desde el Cine donde se presentaba.

  Cuando era estudiante de secundaria, alguien me prestó una
historieta en donde se describían algunos de los dioses aztecas
e hice una prueba de memoria. Me puse la meta de recordar todo
el tiempo que pudiera los nombres de los dioses: "Quetzacoatl"
"Tlakaelel" "Tezcatlipoca" y hasta ahora a mis 68 años aún
los recuerdo.

  Luego en mis viajes a Europa (tres, hasta la fecha) me encontré
con gente mexicana, quienes fueron los latinoamericanos más
amables que encontré. Una vez estuve extraviado en el bus que
me traía de regreso desde Versalles y no sabía francés.

  Ahí me encontré con un joven mexicano que estaba estudiando
para ser sacerdote, quien me ayudó guiándome en la ciudad.

  Al otro día luego de estar durante dos días comiendo sandwiches,
me llevó al barrio latino, donde al fin pude comprar un plato de
comida hispanoamericana.

   En otra oportunidad, conocí a otro joven mexicano que me llevó
a conocer la Universidad de La Sorbona en Paris y estuvimos en
los jardines de Luxemburgo, en la misma ciudad, conversando
animadamente.
 
  Los mexicanos fueron muy amables conmigo en mis viajes
anteriores; ahora los conoceré personalmente y les contaré de
mis impresiones pronto.

  Aquí los peruanos queremos tanto a México y su cultura, así
como sus dichos, que perpetuaron "Cantinflas" y otros cómicos
y actores como actrices mexicanos, que nuestro lenguaje
coloquial está lleno de expresiones del mero México.

 Y además, aquí las fiestas de cumpleaños son animadas por
charros y mariachis peruanos y estoy seguro que en muchos
otros países hispanoamericanos harán lo mismo, por lo tanto,
deberían hacer concursos en el país de origen de charros y
mariachis latinoamericanos.

   Y ni hablar de la comida mexicana. Aquí hay restaurantes
que ofrecen tacos, enchiladas y otros platillos típicos del sabor
mexicano.

   Claro que será preferible comerlos en su lugar de origen y
escuchar a los mariachis de ese país tan querido al que nos une
la historia de haber sido las dos grandes culturas en donde
estuvieron los imperios más grandes de norte y sudamérica:
El Imperio Azteca y el Imperio de los Incas.

   San Borja, 7 de setiembre del 2014.

 EMILIO ULISES ROBLES HORA.
 
 

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