sábado, 27 de agosto de 2011

¿Y CÓMO ERA LA SIRENA? De mi poemario "La Sirena de Plata".




   NOTA DEL AUTOR

   Un tiempo antes de la publicación de este poemario
le dí a leer a un amigo joven, vecino de mi casa,   los
originales para que me diera su opinión.  Él me dijo:

  - Está muy bien, pero hablas poco de la Sirena,
    debes escribir más sobre ella.
 
    Al regresar a mi casa, me puse a redactar algo
acerca de lo que me dijo el amigo y conseguí el
siguiente poema, que fue uno de los que más me
agradó del poemario: "La Sirena de Plata".
 
   Espero que ustedes también lo disfruten.
 
        ---------------

¿Y CÓMO ERA LA SIRENA?

¿Y cómo era la sirena?
me preguntó algún amigo.
¿Era acaso una sirena
o un simple desvarío
a los cuales acostumbras
a ilusionarnos sin tregua?
Si tú no quieres creerme
ven conmigo hacia la playa
y me siguió hasta la arena
aquella arena plateada
de donde se había ido
el ensueño de esa tarde.

¿Logras ver el rayo verde?
le pregunté y él no estaba
en trance como yo mismo
porque muy pocos consiguen
evadirse de este sueño
sin engaños verdaderos.

Si no ves el rayo verde
no encontrarás la sirena
y el amigo respondióme:
sólo veo el Sol naranja
y sus rayos me perturban
me siento como aturdido
y puedo volverme ciego.

Entonces, créeme amigo
la sirena era de plata
y lograrás comprobarlo
cuando se cieguen tus ojos
a la luz de los sentidos
y llegues a darte cuenta
que existe, lo que no existe
envolviéndote en colores
que no pueden describirse
al entrar al torbellino
de luces que no se apagan
y así podrás vislumbrar
a la sirena de plata.

Y el amigo incomprendido
dijo a todos: "no se puede
ingresar a su locura
que mejor lo dejen solo.
Imagina en su memoria
sirenas que no aparecen"...

Y cuando estuvimos solos
la sirena de plata y yo,
ella me dijo: no cuentes
a nadie de mi existencia.
La gente no logra verme
aunque describan mi imagen.
Si quieres seguirme viendo
no les hables de sirenas...

Ahora yo te comprendo
le respondí convencido,
aunque nunca les creyera
a quienes se embelesaban
con planetas muy lejanos
o platillos voladores.
No volveré a mencionarte
si prometes no dejarme.

Y el rayo verde brillaba
llevándose a la sirena
y el torbellino dio vuelta
al entorno de la playa
atrapándome en sus redes
y me llevó al lado de ella.

-------------

AUTOR. EMILIO ULISES ROBLES HORA

Copyright by: Emilio Ulises Robles Hora
"La Sirena de Plata"
Primera Edición 1998.

No hay comentarios:

Publicar un comentario